Para la protección de acero contra la corrosión en áreas que incluyen las chimeneas de combustión de gases, chimeneas, escapes, ventiladores y tuberías, a temperaturas de hasta 540° C (1004°F). Cuando se requiere una buena protección anticorrosiva, la aplicación se debe efectuar sobre una imprimación de silicato de zinc (por ej. Interzinc 22).