Arquitectura contemporánea: ¿cómo se aplica al diseño institucional?

La arquitectura contemporánea nos remite al diseño arquitectónico de estos tiempos. Es decir, el estilo y las tendencias seguidas en la mayor parte de las construcciones actuales, ya sean viviendas o edificios institucionales.

Es importante no confundir esta corriente con la arquitectura moderna, que marcó las primeras décadas del siglo XX. Tras la Revolución Industrial, la máquina, la practicidad y la productividad se hicieron carne en grandes estructuras de cemento o acero, sin ornamentación y con grandes aberturas de cristal (Houzz, 2019).

Sin embargo, la arquitectura contemporánea, la más actual, tiene otras premisas. Veamos sus principales atributos y cuáles son sus aportes al diseño interior, especialmente el institucional.

Principales características de la arquitectura contemporánea

1. Ornamentación

   Los espacios amplios y limpios están entre las grandes insignias de la arquitectura contemporánea. Así, aparecen pocos elementos ornamentales y casi siempre están al servicio de la funcionalidad. La belleza se logra, principalmente, por medio del acabado de los materiales.
   Esto resulta esencial para el diseño institucional, donde los espacios internos se proyectan para cumplir con actividades específicas. Los ambientes deben ser prácticos y funcionales; a su vez, el mobiliario y las estructuras no deben entorpecer las tareas que allí se realizan. Sin embargo, tampoco tienen que dejar de lado el aspecto estético para promover el bienestar y la socialización.
   Un gran ejemplo a nivel internacional es la Universidad de Economía y Negocios de Viena. El centro de cada planta es un amplio espacio de uso común, mientras que cada piso cuenta con aulas y oficinas con terrazas. Esta estructura facilita la circulación y el intercambio entre personas que estudian y hacen negocios.
   Por su parte, el Unicentro de Cali, un reconocido centro comercial, ofrece galerías a cielo abierto con entrada directa a los locales comerciales y un patio central verde. De esta forma, la experiencia de compra se complementa con la posibilidad de pasear y reunirse en un entorno relajado.

2. Fusión de interior y exterior

   La mayoría de los edificios modernos proponen una fusión entre interior y exterior. En ellos se da una transición suave entre ambos, apelando a diferentes recursos. Por ejemplo, grandes ventanales de vidrio, tipos de estructuras más abiertas y paletas de colores más naturales.
   Estas cualidades ofrecen importantes beneficios en términos de diseño institucional. Las construcciones de tipo abierto aumentan la accesibilidad, y la fusión con el entorno aporta una sensación de armonía y bienestar. Incluso, una de las grandes tendencias es la “planta abierta” (Arkiplus, 2022), donde existe un ambiente único que es sectorizado con diferentes recursos.
   Desde ArchDaily (2018) muestran una serie de casas icónicas que permiten entender la planta de arquitectura moderna. Esta genera nuevos ambientes interiores y estructuras de acuerdo con las necesidades de sus habitantes. Estos recursos pueden aplicarse, además, a espacios institucionales como hospitales o centros educativos, dependiendo de las nuevas demandas de sus usuarios.

3. Estilos protagonistas

   Sin duda, el minimalismo es uno de los estilos favoritos de la arquitectura contemporánea. Espacios funcionales, líneas simples y puras, madera y fibras naturales, pocos elementos decorativos: estas son sus principales características. Otra de las tendencias protagonistas es la industrial, que privilegia el uso del acero y el vidrio en ambientes despejados y prácticos, inspirados en las fábricas. Sus ventajas son contundentes:

   • • Las estructuras de los edificios quedan visibles, lo cual reduce costos en revestimientos.
     • Admite el uso de materiales sin tratar, como placas de hierro ligeramente oxidadas o maderas sin pulir. De esta forma se ahorra tiempo y dinero en acabados exteriores.
     • Tiene un aire ecléctico que tolera bien las combinaciones con otros estilos. Por ejemplo, aportes del minimalismo o una decoración interior vintage.
       Ambos estilos, el industrial y el minimalista, ofrecen grandes ventajas al diseño interior, pero no solo por su estética armoniosa y equilibrada. Ante todo, porque privilegian la luz natural y se basan en materiales nobles, simples y duraderos.

4. Tipos de espacios

   La habitabilidad de los espacios es uno de los criterios esenciales de la arquitectura contemporánea. Así, promueve estructuras de líneas rectas y limpias, donde predomina la practicidad y la comodidad. Por medio de las formas, los materiales y la distribución de los ambientes, intenta crear un entorno liviano y relajado.
   Bajo estas premisas, los proyectos de diseño institucional ofrecen ambientes más informales, donde las personas se sientan a gusto. Ambientes fáciles de limpiar y mantener, pero también de usar y transitar. Las áreas comunes, como las zonas de recepción y descanso, los jardines internos y las escaleras, deben adaptarse a las necesidades de la mayoría de los individuos.

5. Materiales favoritos

   Vidrio, acero, piedra, madera, mármol: la arquitectura de estos tiempos decreta el retorno a la naturaleza. Los materiales naturales ofrecen excelentes acabados, alta resistencia y una estética más bien minimalista.
   Más allá de estas ventajas, son materiales amigables con el entorno y que promueven una sensación de bienestar. Por ejemplo, para el diseño de ventanas, se promueve la instalación de enormes ventanales de vidrio que permitan el paso de la luz natural. Esto es fundamental tanto a nivel residencial como institucional. Principalmente, porque reduce el gasto energético y ofrece sensación de espacio.
   Para descansar la vista y ampliar visualmente los espacios, la arquitectura moderna también recurre a los colores claros y neutros. Por ejemplo, blanco, beige, arena, la gama de los grises y algunos tonos de verde o azul. En este sentido, hoy contamos con pinturas que contribuyen, desde sus componentes y fabricación, al cuidado del medio ambiente y la salud.

6. Sostenibilidad

   En las últimas décadas, ha crecido la preocupación de la arquitectura y el diseño por conservar el medioambiente. Es así como han surgido numerosas tecnologías y recursos para crear proyectos más sostenibles. Por ejemplo, con la construcción de edificios energéticamente eficientes, estructuras para aprovechar la luz solar y el uso de materiales ecológicos.
   Además, existen diferentes materiales de construcción que hoy en día son tendencia porque cuentan con certificaciones sostenibles. Por ejemplo, la certificación EDGE para construir edificios ecológicos o la certificación WELL, que monitorea las características de los proyectos construidos para medir su impacto en la salud de las personas.
   La sostenibilidad resulta especialmente importante en el diseño institucional, ya que involucra espacios con un alto tránsito de personas. Con estas estrategias, es posible minimizar el impacto ambiental y el uso de recursos naturales en todo tipo de organizaciones.

La arquitectura contemporánea ofrece una interesante síntesis entre estética, funcionalidad y sustentabilidad. Ten en cuenta sus principios para diseñar espacios interiores modernos, eficientes y armoniosos al mismo tiempo.

Referencias bibliográficas

Arkiplus. (2022). Características de la arquitectura contemporánea.

Houzz. (2019). Moderno o contemporáneo: ¿Cuál es la diferencia en arquitectura?